19 set. 2011

Quien sale ganando, con todo esto?


Déjà vu senderista



Por Augusto Álvarez Rodrich alvarezrodrich@larepublica.com.pe
¿De qué hablamos hoy cuando hablamos de terrorismo?
Cuando coinciden varias señales que, desde diferentes ángulos y escenarios, producen un déjà vu terrorista, es una obligación del gobierno la identificación correcta de qué estamos, en realidad, enfrentando.
Esa extraña sensación de vivir una situación que creemos que ya hemos vivido antes, y que los franceses llaman déjà vu, se vivió esta semana en el Perú en la que se cumplían –el lunes 12 de setiembre–19 años de la captura del máximo líder terrorista Abimael Guzmán por la confluencia de varios hechos.
La más dramática fue, sin duda, el ataque lanzado el miércoles 14 por un grupo senderista a cargo del ‘camarada Omar’          –como reveló ayer La República– contra un helicóptero militar en San Martín de Pangoa, en el VRAE, que les costó la vida a dos oficiales del Ejército Peruano, el comandante Esneider Vásquez Silva y el capitán Jenner Vidarte Campos, hoy héroes del país.
En la misma semana hubo ocho expresiones de ‘terrorismo blanco’: llamadas telefónicas que alertaban de la colocación de bombas que luego se supo que eran bambas. La primera ocurrió el mismo lunes 12 a pocas cuadras de la calle Tarata, en Miraflores, un lugar emblemático de los tiempos del terrorismo.
De manera simultánea, en varias zonas de Lima –desde Villa El Salvador hasta San Juan de Miraflores– aparecieron pintas demandando ‘Libertad para Abimael Guzmán Reinoso’.
El ‘Movimiento por Amnistía y Derechos Fundamentales (Movadef), vinculado a Abimael Guzmán y cuyo objetivo principal es lograr la liberación de su líder para que salga de la Base Naval en donde se encuentra preso, reivindica la autoría de las pintas pero no de las llamadas telefónicas
Manuel Fajardo, dirigente de Movadef, un abogado de Abimael Guzmán, defiende su derecho a realizar las pintas con el argumento de que “las paredes son las pizarras del pueblo” y que los lemas usados no llaman a la lucha armada. En ese sentido, otro abogado del líder de Sendero, Alfredo Crespo, niega la autoría sobre las bombas bambas así como cualquier acción terrorista en la actualidad: “Los tiempos han cambiado, hoy no es tiempo de la lucha armada en el país”.
En este contexto, es relevante precisar con claridad de qué hablamos cuando hablamos hoy de terrorismo, cómo se articula el narcotráfico en cada caso, e identificar a los autores de cada tipo de acción, sin caer en el error de asignar su autoría a un mismo sector, sabiendo diferenciar a la Movadef del senderismo del VRAE, y sin caer en el facilismo de atribuir estas movidas, sin pruebas, a sectores políticos como el fujimorismo o el aprismo, tal como algunos realizan en estos días.
Ojalá que los ministerios del Interior y Defensa, así como el Servicio de Inteligencia y la Dircote, estén hoy a la altura del desafío.

Edición de Luz & Sombras. Fuente original:_